A esta nota la hice para Sociedad Libanesa / Instituto Líbano (27/9/2019)
El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos otorgó a su oficina consular en Beirut plenos poderes para la no renovación de visas vencidas y revocación de visas ya emitidas de ciudadanos libaneses. La medida, que no incluye una notificación previa, afectaría también a los libaneses que tienen otra nacionalidad y un segundo pasaporte emitido por ese país.
El Ministerio de Relaciones Exteriores presentó su queja al Departamento de Estado, que en Estados Unidos es quien maneja los vínculos con otros países. Desde la oficina gubernamental le respondieron que los consulados son jurisdicción exclusiva de Seguridad Nacional.
La noticia se hizo pública hoy luego de que a Jamil Jabaq, ministro de Salud del Líbano y cercano al partido Hezbolá, le fuera negada la renovación de su visa. Por tal motivo, el funcionario no pudo integrar la comitiva del presidente Michel Aoun, que viajó el pasado domingo a Nueva York con motivo de la apertura de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Al parecer, el consulado tampoco otorgó visas a otros miembros del equipo del primer mandatario, pero sus nombres no trascendieron.
Esta medida tiene lugar en un contexto de creciente presión por parte de Estados Unidos sobre Hezbolá, el partido libanés aliado de Irán, con quien el gobierno de Washington se encuentra enfrentado y a quien acusa de terrorismo. En julio pasado, los funcionarios de Trump dictaminaron el congelamiento de cuentas en el extranjero y dificultaron el acceso al sistema financiero internacional de tres miembros de esa agrupación: los diputados Mohammad Raad y Amin Sherri y el referente partidario Wafiq Safa.
Said Chaya 